16 d’abril 2007

Cosas que me sacan de quicio (1)


Papás y mamás del mundo, dejad de pegarme la brasa con la maravillosa experiencia de la maternidad y la paternidad. Abandonad ese proselitismo que os sienta tan mal. No tengo nada en contra, incluso puedo echar un vistazo a vuestros vástagos sin experimentar excesivo repeluz. Respeto vuestra opción, como no puede ser de otro modo, pero respetad la mía y la de los que son como yo. Los tópicos son siempre repugnantes, y decir que me estoy perdiendo una gran experiencia vital es decir poco o nada ¿Y la que os perdéis vosotros? No voy a caer en vuestros mismos errores y, por tanto, no abundaré en la experiencia que supone enfrentarse a esta vida (la única que tenemos) sin las excusas morales de la familia, los hijos y la esperanza en un mundo mejor y todo ese montón de mierda. Y, por favor, en restaurantes, reuniones y demás eventos donde todos no son como vosotros, dejad de comentar los precios de papillas, las anécdotas infantiles y las variedades de pañales. Os juro que es aburridísimo. Parece que os estéis convenciendo de algo de lo que no estáis demasiado seguros. Mal de muchos, consuelo de tontos.

2 comentaris:

Anònim ha dit...

És el preu que em de pagar la gent que busquem el sentit de la vida en nosaltres mateixos i no en els altres a través de la procreació

Anònim ha dit...

Hi estic del tot d'acord...